Bando: Izquierda y/o Republicanos - Otros | Municipio: Baeza |
Historia:
36 años, cabo paracaidista, hijo de Bernardo y Manuela, casado con Luna Méndez Alonso, domiciliado en calle Sacramento, 30.
Baeza, 30 agosto 1939. Hechos:
– Cabo paracaidista que al iniciarse la guerra se puso incondicionalmente al lado de los “rojos” siendo nombrado teniente de milicias y encargado de organizarlas.
Mando primero una sección y después la jefatura de ella.
– Vocal del comité de guerra en representación de la Agrupación Socialista.
– Intervino en saqueos, registros, detenciones, incautaciones de fincas urbanas y asesinatos que en Baeza se cometieron que aunque no interviniera personalmente dirigía a los milicianos que si lo hacían.
– Favoreció a algunas personas de orden y evitó asesinatos pero se negó a intervenir para evitar tales crímenes cuando no los ordenó o tomó parte directa en su ejecución.
Concretamente el día 29 de octubre de 1936 con ocasión de estar curando en Mancha Real a un capitán de milicias a donde se había trasladado desde Baeza por un tiro en un pie que había recibido, se presentó un teniente de milicias que resultó ser el hoy procesado tuvo una conversación donde se dijo que el servicio se había cumplido haciendo referencia a la ejecución de 14 personas que al día siguiente aparecerían asesinadas.
– La noche del 27 de noviembre de 1936 el procesado dijo a un cabo de la Cruz Roja que aquella noche fuera al hospital por si ocurría algo y efectivamente poco después salía de su casa Luis Palomares, oyéndose inmediatamente unos disparos asomándose a la puerta María Palomares, hermana de Luis, viendo el cadáver de su hermano y al lado al procesado José Romero que en unión de un tal Sol Acero montó el cadáver en un camión y lo llevaron al cementerio.
– En otra ocasión habiendo ordenado las autoridades republicanas que todos los individuos de 18 a 45 años habían de recibir instrucción militar con objeto de que se presentaran los que estaban escondidos, el procesado fue encargado de tal instrucción, ordenando personalmente la detención de Juan Manuel Molina, los hermanos Amonasis y de un sacerdote llamado Catena que se habían prestado para cumplir aquella orden, siendo todos conducidos al Cuartel de las Milicias y después asesinados.
– Por su carácter e influencia es uno de los principales responsables de todos los crímenes y desmanes cometidos en la población.
Fallo: pena de muerte.
El inculpado:
Fue mando de una sección de milicianos. En noviembre de 1936 se recibió una orden para que las milicias se incorporasen a los frentes, quedándose el declarante en la plaza al mando tan solo de unos 15 o 20 hombres y de la guardia municipal para el mantenimiento del orden…
Libro 6 / Leg. 485 Núm. 17139 Sum. 21274.