Bando: Izquierda y/o Republicanos - Otros | Municipio: Linares |
Historia:
Sin sentencia.
El inculpado. Linares, 15 enero 1940:
Le escribió una carta al señor Lerroux con motivo de las tradicionales fiestas de navidad y como felicitación de las Pascuas según costumbre en esta época pues con Alejandro Lerroux le unen desde hace muchos años no solo lazos de amistad y particular sino de carácter profesional por haber sido abogado del inculpado en diversos pleitos que ha tenido por consecuencias de los negocios a que se ha dedicado.
Respecto a las esperanzas que hace referencia Lerroux en una carta se refiere a la mejora de la esposa del inculpado que estaba en Madrid desde hacía 1 año gravemente enferma viviendo en un piso de la calle de Los Hermanos Quintero.
Manifiesta que su matiz político ha sido siempre republicano y amigo particular del citado Lerroux pero enemigo acérrimo y adversario tenaz de la llamada política de izquierdas.
Ha defendido siempre y en toda ocasión incluso con riesgo para su vida como es notorio en la ciudad de Linares, a las principales personas de orden, la propiedad y las ideas religiosas.
Ha desempeñado en varias ocasiones el cargo de alcalde de la ciudad de Linares durante la monarquía y después de ella, precisamente por ello ha venido luchando con tanto denuedo como exposición personal contra el marxismo, siendo combatido por los marxistas con verdadera saña, habiendo sufrido desde hacía años injurias constantes y atroz persecución, culminando con agresiones personales sin que nunca su espíritu ni entereza hayan flaqueado para contener sus atropellos y desmanes.
Convencidos los partidos de izquierda de la ineficacia de combatir al inculpado pues cuanto mayor violencia y agresividad desplegaban más simpatía y entusiasmo despertaba su actuación política entre los elementos de orden religioso, quisieron atraérselo con halagos y a tal fin el partido de Izquierda Republicana le nombró socio de honor, creyendo que con este nombramiento claudicaría de sus postulados políticos e ingresaría en el partido. Como consecuencia de tal nombramiento le enviaron gran cantidad de cartas timbrados con el nombre y apellidos del declarante, con la apostilla de “Socio de Honor de Izquierda Republicana”.
Como era de esperar con la firmeza de su conducta rechazó el nombramiento del que fue objeto y por tal escasez de papel ha utilizado el que le enviaron timbrado a su nombre pero tachando la apostilla de socio del indicado partido de izquierda ya que nunca perteneció al mismo y era conocido enemigo del programa que desarrollaba y por la citada escasez de papel fue en este papel donde le escribió las cartas a Lerroux.
Su actuación política fue conocida en todo Linares por haber defendido siempre con todo entusiasmo la propiedad, el orden y las ideas religiosas tanto como simple vecino como cuando ostentó el cargo de alcalde, pudiendo citar la quema de conventos en 1931 personándose en las Esclavas Concepcionistas y Agustinas, auxiliando y amparando a las monjas en ellos recluidas.
Siendo alcalde le sorprendió la huelga revolucionaria de campesinos recorriendo personalmente todos los cortijos amparando a los patrones contra los atropellos de que eran víctimas e imponiendo a los elementos revolucionarios la autoridad y el orden aún con riesgo inminente para la vida del inculpado.
Las famosas huelgas de las minas de Arrayanes y la del trágico recuerdo de octubre de 1934 a diferencia de la mayoría de los pueblos de la provincia logró sujetar a los elementos marxistas tan destacados en esta población minera y evitar que tuvieran lugar los luctuosos sucesos que ocurrieran en España por aquellos días por lo que fue agasajado con un banquete ofrecido en su honor por las personas de mayor relieve del municipio en el que le testimoniaron su mayor respeto y adhesión por la política de orden que venían desarrollando en su cargo de alcalde.
Las procesiones de semana santa de 1934 se celebraron a pesar de que los elementos marxistas colocaron petardos y explosivos en los domicilios del hermano mayor de una cofradía, el señor Cobo, y en el del señor cura párroco D. Juan Pardo.
Como era de presumir por su actuación política y ardua lucha contra el marxismo, fue detenido el inculpado por orden del Frente Popular el 8 de octubre de 1936, siendo conducido a la cárcel por unos milicianos, intentándolo sacar aquella misma noche para asesinarlo y celebrar su muerte según verificaban el aniversario de la revolución de octubre fracasada en Linares como ha manifestado por las oportunas y eficaces medidas adoptadas por el inculpado en aquella fecha.
En diferentes ocasiones intentaron asesinarlo que se frustró por diversas circunstancias permaneciendo en este cautiverio hasta abril de 1937 cuando le permitieron salir de la cárcel pero a condición de constituirse en prisión en su propio domicilio.
Al triunfar las izquierdas en febrero de 1936 lo destituyeron de su cargo de alcalde sin haber realizado actividad política desde ese momento.
Todo cuanto tiene declarado con relación a su actuación política, persecución de los elementos marxistas y destitución de la alcaldía al triunfar las izquierdas, por ser hechos públicos y notorios pueden corroborarlo las personas de mayor relieve de la población y singularmente las que desempeñaban antes de las elecciones de febrero de 1936 los cargos de presidentes de la Concentración de Derechas y Cámara Agrícola como también los señores párrocos o los funcionarios de policía de aquella época además de las manifestaciones de los dirigentes y concejales socialistas, Felipe Palacios y Andrés Domingo, obrantes en los libros de sesiones del Ayuntamiento.
Leg. 118 Núm. 4942.